- "Hasta mañana, amigos paidófilos!"
se despidió Sarko el viernes pasado de un grupo de periodistas franceses en Lisboa, tras un encuentro informal en la cumbre de la OTAN. Estaba indignado porque le habían preguntado por su supuesta implicación en la venta de submarinos militares a Pakistán, 1994, y en el supuesto desvío de retrocomisiones para financiar de forma fraudulenta la campaña electoral de Edouard Balladur al Eliseo, cuando era ministro del Presupuesto y portavoz de su equipo de campaña, 1995.
Al Patán le sobran motivos para atacar a la prensa desde aquella portada de Paris-Match que exhibía a la infiel Cécilia, cuando todavía era su esposa, al lado de su amante.
Intentando excusarle ahora, su ministro de Defensa, el veterano Alain Juppé, apuntó a "la presión mediática" a la que Sarko está sometido, culminando con una tautología:
- Todo ser humano es humano.
Mirá vos.
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