Pinochet sale del armario
Robert Mur | 19/01/2010 - 16:12 horas
La policía también está preparada para reprimir a la derecha, si hace falta. Cuatro jinetes de carabineros, con chaleco antibalas y casco, y sus cuatro caballos, miran atentamente a los seguidores de Piñera, que ocupan la plaza Italia, tradicional centro de celebraciones deportivas de la capital.
Muy cerca, en la allendista Alameda, Piñera ha acabado su discurso y se ha ido sacando el cuerpo por el techo solar de su coche y ondeando una bandera chilena.
La gente lleva bandas presidenciales que se venden a mil pesos (1,4 euros) y tira confeti.
En corrillo, un centenar de personas, la mayoría jóvenes, baila, bebe y canta. Pero hace tiempo que esos cánticos, que tienen un apellido por denominador común, no se oían. El repertorio es extenso. "Libertador de Chile, Augusto Pinochet". "Viva Chile, Pinochet". "General Pinochet, este triunfo es para usted". "Mientras Chile exista, habrá pinochetistas". "Augusto es un valiente".
Una joven pareja habla con el cronista. Cristóbal, 22 años, dice que estuvo en el funeral de Pinochet y se alegra de que por fin la Concertación deje de "robar plata". Dominique, 19, siempre ha vivido en democracia, pero es pinochetista porque su familia "sufrió mucho" durante el gobierno socialista de Allende.
Un coronel de carabineros, que oculta su alegría, disuelve pacíficamente el corrillo para que pasen los coches. "Sigan allá, no hay problema", repite sonriente.
El grupo se recompone sobre la acera y sigue cantando. "El que no salte es comunista maricón".
"Frei, escucha, ándate a la chucha (mierda)". "Comunistas, maricones, os ganaron los valientes campeones". "Se fueron los ladrones". "Y van a ver, somos derecha otra vez". Un equipo del Canal 13 -propiedad de la Iglesia católica- es abucheado y debe irse. "¡Comunistas!".
Dos horas más tarde, la plaza Italia está casi vacía, pero en una esquina un equipo de CNN Chile hace un directo. Una joven que lleva una foto de Piñera no para de increpar al periodista. Acaba el directo y se acerca para puntualizarle: "¿Por qué dijiste dictadura? ¡Se dice gobierno militar!".
Muy cerca, en la allendista Alameda, Piñera ha acabado su discurso y se ha ido sacando el cuerpo por el techo solar de su coche y ondeando una bandera chilena.
La gente lleva bandas presidenciales que se venden a mil pesos (1,4 euros) y tira confeti.
En corrillo, un centenar de personas, la mayoría jóvenes, baila, bebe y canta. Pero hace tiempo que esos cánticos, que tienen un apellido por denominador común, no se oían. El repertorio es extenso. "Libertador de Chile, Augusto Pinochet". "Viva Chile, Pinochet". "General Pinochet, este triunfo es para usted". "Mientras Chile exista, habrá pinochetistas". "Augusto es un valiente".
Una joven pareja habla con el cronista. Cristóbal, 22 años, dice que estuvo en el funeral de Pinochet y se alegra de que por fin la Concertación deje de "robar plata". Dominique, 19, siempre ha vivido en democracia, pero es pinochetista porque su familia "sufrió mucho" durante el gobierno socialista de Allende.
Un coronel de carabineros, que oculta su alegría, disuelve pacíficamente el corrillo para que pasen los coches. "Sigan allá, no hay problema", repite sonriente.
El grupo se recompone sobre la acera y sigue cantando. "El que no salte es comunista maricón".
"Frei, escucha, ándate a la chucha (mierda)". "Comunistas, maricones, os ganaron los valientes campeones". "Se fueron los ladrones". "Y van a ver, somos derecha otra vez". Un equipo del Canal 13 -propiedad de la Iglesia católica- es abucheado y debe irse. "¡Comunistas!".
Dos horas más tarde, la plaza Italia está casi vacía, pero en una esquina un equipo de CNN Chile hace un directo. Una joven que lleva una foto de Piñera no para de increpar al periodista. Acaba el directo y se acerca para puntualizarle: "¿Por qué dijiste dictadura? ¡Se dice gobierno militar!".
No hay comentarios:
Publicar un comentario